lunes, 6 de diciembre de 2010

Un año


Un año… un año hace hoy del día más triste de mi vida. Es difícil asimilar que ya hace un año que no te veo, que hace un año que no te puedo abrazar, que hace un año que no escucho tu inconfundible risa,… que hace un año que esta puta vida, que aún algún pobre infeliz se cree que es justa, decidió que ya habías disfrutado bastante de ella. Pero no quiero dedicarte estas pobres líneas para lamentarme, sino para seguir recordándote como te mereces, pues sé, que estés donde estés ahora, podrás entender esto que aquí te escribo.

Paradójicamente, a pesar de lo largo que se me ha hecho este año, me parece que fue ayer la última vez que nos vimos. Recuerdo a la perfección cómo, cada vez que me veías, lo primero que hacías era hacerme cosquillas de esa forma tan peculiar con tus deditos en mi brazo izquierdo, siempre igual; era tu forma de saludarme y decirme que te alegrabas de verme. Esa no es la forma en la que se suelen saludar las personas, lo “normal”, que no es más que lo que hace la mayoría, sería que me dieras dos besos… ¿Pero es que acaso por no hacerlo como indica la norma social tiene menos valor esa muestra de cariño? Por supuesto que no; yo diría que incluso tiene más valor, pues te habías inventado, exclusivamente para mí, una forma de expresar tu cariño. Sin duda, aquello hacía sentirme especial, pues las personas especiales como tú tienen ese gran don: transmitir esa sensación de ser únicos a los demás. Y ese gran sentimiento que sólo tú eras capaz de transmitirme con un gesto tan sencillo, siempre lo recordaré, pues todavía algunas noches al despertarme noto esa sensación en mi brazo; algunos dirán que se debe a la confusión que causa el sueño reciente, pero yo sé que eres tú recordándome que todavía estás conmigo y que sigues alegrándote de verme.

Al ser una persona distinta a las demás no todo te fue fácil, de hecho muy pocas facilidades tuviste en esta vida. Pero eso a ti te importaba poco. Siempre te gustó conocer cosas nuevas, intentabas aprender todo lo que veías o te trataban de enseñar. Muy pocas veces lograbas tu objetivo, pero siempre terminabas lo que fuera que fuese con una sonrisa, pues el simple hecho de haber intentado aprender algo ya te causaba felicidad. Aunque ahora me doy cuenta de que posiblemente se trate simplemente de que tu objetivo no fuera hacer las cosas perfectas, sino tener la suficiente perseverancia como para esforzarte en hacerlas; tu objetivo no era el egoísta de superar a los demás, sino el humilde de superarte a ti misma.  Sin duda eras todo un ejemplo a seguir, aunque hubiera gente que te mirara por encima del hombro y su prepotencia impidiera siquiera plantearse que podrían aprender algo de ti. Lástima siento de ellos, que como borregos ególatras no son capaces de ver más allá de los hechos ni de ellos mismos.

Miles de cosas podría seguir diciendo de ti, pero el objetivo de estas palabras no es describirte, pues ya sabes de sobra cómo eres. Lo único que trato es poder volver a hablar contigo, aunque no me puedas responder. Quizás sea absurdo, pero yo no lo creo así, tenía la necesidad de dedicarte unas palabras. ¿Por qué  hoy? ¿Por qué es tan dura la fecha de un año de tu muerte? ¿Es que acaso el día 365 de tu trágica despedida te echo más de menos de lo que te eché el 364 o de lo que te echaré el 366? Por supuesto que no, por supuesto que todos los días me acuerdo de ti, que todos los días te saludo en mi corazón, que todos los días al ver tu foto una melancólica sonrisa se me asoma al recordarte… Pero así de raro es el ser humano, que crea fechas simbólicas para todo. Ojalá no las creara, pues todos los días he tratado de recordar tu vida pero hoy no puedo otra cosa que recordar tu muerte… Y es que hoy soy yo el que te quiere acariciar el brazo izquierdo, el que quiere volver a alegrarse por verte… Hoy soy yo el que necesita que me cuides, desde tu pequeño cielo en el que ahora vives.

2 comentarios:

Königin dijo...

Qué bonito... hace mucho tiempo que no leía algo tan sincero y lleno de sentimiento. Me has alegrado el día, sigue así.

Jalfo dijo...

Muchas gracias por tu comentario, me alegra saber que te gusta lo que escribo ^^